Si tuvieras la oportunidad de mostrarle al mundo lo que representa Puerto Rico ¿cómo lo harías? Mientras me planteo esta pregunta retumba en mi cabeza las letras de la famosa canción ¿Quién no se siente patriota?” de Andy Montañez…” Puerto Rico, patria mía, la tierra de mis amores…” No cabe duda que la mejor manera de sumergirse en una cultura es por su gente, su lenguaje, su música y su comida. Esto es precisamente la misión del colectivo de chefs puertorriqueños que componen Cosa Nuestra. Estos reconocidos chefs locales se han convertido en embajadores de Puerto Rico con la misión llevar nuestra cultura al mundo para así ir creando puentes que nos acercan. Pero no podemos hablar de Cosa Nuestra, sin primero hablar sobre su creador, el chef Manolo López.
Una semilla sembrada por el amor de madre
Para Chef Manolo, su pasión por la cocina nace en su hogar. Su madre, Margarita Cruz hizo de la cocina el núcleo de su vida familiar. “Allí era donde traías tus alegrías, tus penas, tus problemas, todo se resolvía o se celebraba en la cocina”. Cuando era joven, Chef Manolo tenía buenas notas, pero sus maestros se quejaban de que contaba con mucha energía y no lo podían controlar. En un intento de canalizar su ímpetu, su madre le empieza a enseñar a cocinar a sus 13 años. A los 14 años, lo matricula en la Escuela Hotelera de San Juan para unos cursos sabatinos de cocina internacional. Ella lo llevaba todos los fines de semana desde su hogar en Aguada a Guaynabo por espacio de un año. Tras graduarse de escuela superior, ingresa al Recinto de Mayagüez donde estudió Administración de Empresas con concentración en Mercadeo. En el 2011, llega a Nueva York para estudiar diseño en NYU ya que viniendo de una familia de empresarios y creativos, siempre había gravitado hacia estas dos áreas. Sin embargo, no culminó sus estudios por lo costoso que era. Como ya tenía un portfolio preparado, consiguió trabajo con London Luxury donde se desempeñó como diseñador por tres años. Durante este tiempo, se da cuenta que estaba cansado de la industria de diseño ya que, a pesar de ganar buen dinero, no podía expresar su creatividad. Por esta razón, en el 2014, chef Manolo decide regresar a la cocina y nace el hombre de negocios que conocemos hoy.
El pilón que revolucionó la ciudad de Nueva York
Para ese tiempo, se estaban mudando muchos jóvenes puertorriqueños a Nueva York para perseguir sus sueños. Como muchos sabemos, la gran manzana se distingue por ser una de las ciudades con las rentas más caras de los Estados Unidos, por lo que, estos jóvenes no contaban con mucho dinero para gastar. Es aquí cuando Chef Manolo comienza a realizar cenas pop-up en apartamentos de amistades en Harlem o Queens. Las mismas eran gratuitas, se ponía un pote y los asistentes daban lo que podían. Ponían salsa, servían Ron Barrilito, si tenían suerte alguien llegaba con Medalla y chef Manolo cocinaba arroz con gandules, pernil, pasteles, mofongo, entre otros famosos platos puertorriqueños. Empezaron con 10 personas, después poco a poco fue creciendo hasta llegar a recibir alrededor de 30 personas.
Chef Manolo sentía que, a pesar de haber una gran comunidad puertorriqueña en Nueva York, la base de la cocina puertorriqueña se había perdido. “Son pocos los restaurantes, como Casa Adela que mantenían la esencia de lo que es la comida boricua, cualquier otro sitio no me sabía a Puerto Rico”. Identificando esta necesidad, es que nace la idea de Mofongo y de crear finger food en Nueva York. Para el 2014, es aceptado en el famoso mercado abierto en Brooklyn llamado Smorgasboard y el resto es historia. Mientras otros conceptos se reducían a ser carpas con su menú en cartulina, Chef Manolo, con su mente de diseñador, vino con su branding al día. “La idea era parecer que ya teníamos un negocio montado, teníamos nuestro logo, y las guayaberas… Queríamos dar a conocer la gastronomía puertorriqueña y nuestra cultura de una manera distinta”.
El éxito llego rápidamente para Mofongo y hasta tuvo la oportunidad de llevar su concepto a Japón participando en Ten Days in New York. El año pasado tuvo la oportunidad de montar su kiosko en Lote 23 y exponerle su producto a miles de puertorriqueños quienes lo recibieron con brazos abiertos. El cielo es el límite para este concepto que ahora se encuentra en un periodo de evolución. Solo el tiempo dirá si continuaran en la carpa o se convertirán en un establecimiento brick-and-mortar.
En la Unión está la Fuerza
Tras su participación en el evento de Puerto Rico Meets NYC, le surge la idea a chef Manolo de realizar una producción que representara verdaderamente la cultura puertorriqueña de una manera multisensorial. El concepto consistía en traer chefs, mixologos y artistas de Puerto Rico para que las personas los conocieran. Utilizando como modelo La Fania, donde todos los artistas eran buenos individualmente, pero al juntarse hacen historia, nace Cosa Nuestra. Un colectivo cuya misión es llevar un pedazo de Puerto Rico a diferentes ciudades para que las personas conozcan nuestra cultura mediante sabores, sonidos y visuales. Reconocidos chefs locales como Xavier Pacheco (Comedería Fonda Urbana), Rene Marichal (Avocado y Argento), Raúl Correa (Zest y Doroteas), Gabriel Antunez (La Hacienda), Carlos Portela (Orujo), Kevin Roth (La Estación), Ibrahim Sanz (Haven Riverfront Restaurant), Guillermo López (Le Bernadin), Maria T. Mercedes Grubb (Gallo Negro) y los mixologos Roberto Berdecía y Leslie Cofresí (ambos de La Factoria) han participado de eventos de este colectivo. “Cosa Nuestra no se limita a utilizar a los mismos chefs siempre, estamos abiertos a buscar integrar más personas. Inclusive estoy pensando hacer un Cosa Nuestra de mujeres en un futuro”.
Cosa Nuestra cuenta con tres eventos principales. Pa’ la Ciudad, el cual por los últimos dos años se ha llevado a cabo exitosamente en Nueva York. Pa’ La Ciudad consiste de una mezcla de comida, alta cocteleria, actos musicales y artistas contemporáneos para así llevar nuestro mensaje. Es una plataforma para expresión boricua que transporta a los asistentes a Puerto Rico. Chef Manolo nos informa que próximamente estará celebrando Pa’ La Ciudad en otras ciudades, por lo que, estaremos pendiente a sus redes.
Cosa Nuestra también celebra unas cenas al aire libre llamadas Atardecer en el Campo. Esto consiste de unas cenas que intentan emular un atardecer en el campo. Chef Manolo, como amante de la cocina tradicional, trata de mantener el lazo con nuestras raíces. La misión es que por el tiempo que dure la cena, los invitados se transporten a un campo de Puerto Rico y te olvides de donde estas.
Chef Manolo siempre ha tenido como misión hacer enlace con otros países Latinoamericanos. “Todos sabemos que existe mucho talento en Latinoamérica, pero no existía una red real para todos colaborar. Mi fin es que la gastronomía de Latinoamérica se dé a respetar”. Es de aquí que surge Salsipuedes, unas cenas que consisten de colaboraciones de chefs puertorriqueños y chefs latinoamericanos con la meta de crear puentes entre estos países.
Este mes, los miembros de Cosa Nuestra hicieron su primera cena en Barranquilla, Colombia donde colaboraron con el gran Alex Quessep. La cena, a la cual asistieron 100 personas, fue una colaboración total entre los chefs y mixologos puertorriqueños con los chefs y mixologos locales. La cena fue un reflejo de la integración entre estas dos culturas. La misma se llevó a cabo en al Fundación Gases del Caribe y fue todo un éxito. “Lo bueno de estos eventos es que abre la puerta para colaboraciones futuras ya sea en Colombia, en Puerto Rico o donde sea”.
Actualmente, el colectivo se encuentra trabajando para hacer más cenas en otras ciudades grandes como Bogotá, Medellín, y Ciudad de Méjico. El cielo es el límite para estos chefs y esperamos ansiosos sus próximos eventos.